Desde el Equipo Saludable de Ospoce hemos hablado de los beneficios del deporte abriendo así una ventana al conocimiento de distintas disciplinas que para muchos lectores son desconocidas.
Queremos hacer hincapié en que el deporte ayuda a mantener la salud y desarrolla habilidades motrices, entre otras ventajas.
En esta ocasión tuvimos una charla con el profesor Martín Pucci, PF de novena de River Plate y coordinador de PF de fútbol infantil.
¿Cuáles son para vos los beneficios más notorios, que brinda el hacer deporte, en tu caso el fútbol, sobre todo en edades tan tempranas?
El valor de enseñar un deporte como el fútbol a temprana edad, se lo doy a la socialización porque creo que es lo más importante en este caso. Por supuesto con diversión, haciendo que el chico o la chica se diviertan con una actividad lúdica. Creo que lo más importante pasa por ahí.
¿Qué valores resaltás o a cuales les das más importancia a la hora de educar mediante el deporte?
Con el tema de la educación a través del deporte me parece que es donde se ponen en juego la comprensión y la situación de aceptar consignas o reglas, de a poco, teniendo en cuenta que se parte del juego simbólico al principio y luego se pasa a lo que es el juego reglado ya que a temprana edad es importante el hecho de respetar al otro, de entender ciertas consignas, el compañerismo y el respeto al profesor o profesora.
¿Cómo planificás un entrenamiento de fútbol? ¿Qué entrenás?
La planificación como cualquier clase de educación física, cuenta en principio con tres momentos de la clase, entrada en calor, el desarrollo, una vuelta a la cancha. Es una regla general, después esos tres espacios se pueden subdividir en otros, pero partimos de esa base.
¿Al resultado de ganar o perder cómo lo toman los niños/as y cómo lo tomás vos desde tu lugar de entrenador?
Con respecto a ganar, perder o empatar soy un convencido de que a través de perder se aprende más, sin dudas, que con el ganar, ya que con esto último uno aveces piensa que todo está bien, y como entrenador o profesor se termina haciendo menos preguntas. Hay que tener un ejercicio importante para saber que el ganar no lo es todo, y que, a pesar de lograrlo, siempre hay cosas para mejorar.
Me quedo con una frase que escuché hace muchos años: Hay tres resultados posibles y no son perder, ganar o empatar sino ganar, empatar o aprender.
¿Si tuvieras que enumerar algunas cosas que no son tan agradables, o que no suman tanto, o que hay que remarla para superarlas, cuales nombrarías y porqué?
En el fútbol infantil algo que no está tan bien, mejor dicho, nada bien, y que pasa mucho en nuestro país sobre todo, son las presiones en los chicos o las chicas. Hoy la empiezan a padecer también en el fútbol femenino, y es esto de querer “salvar” a la familia deseando tener un hijo o hija futbolista. Sería ideal que esto no ocurriera en nuestra sociedad, pero pasa. No le hace bien a los chicos convivir con este tipo de presiones, y lamentablemente se da a temprana edad ilusionándolo con que se va a convertir en futbolista profesional y que va a salvar a su familia económicamente. Muchos jugadores vienen de estratos sociales muy bajos (cada vez más), con mucha problemática que tiene que ver con el comportamiento y la mala alimentación. Debemos tratar de combatir esas cuestiones.
Para ir terminando con esta supercharla, decime que se siente, que sentís vos particularmente, cuando ves que un niño ya no tan niño que entrenaste está jugando en las categorías superiores.
Que un chico que uno haya entrenado finalmente se convierta en un jugador y haya compartido tantos momentos, es la mayor satisfacción que uno puede tener como profesional. Es difícil muchas veces poner en palabras, ya que ese reconocimiento, esa alegría, cuando uno se reencuentra con ese chico que va creciendo hace que uno se sienta bien y con el sentir de haber cumplido con ellos, sobre todo cuando te agradecen los momentos compartidos. Saber así que uno dejó una marca, un recuerdo,es un sentimiento indescriptible, y no hablo sólo de lo deportivo sino también de lo personal ya que uno trabaja para fomentar y formar futbolistas integrales, no sólo como deportistas, sino como personas.
Eso es lo más lindo que puede haber.